VARADOS EN LA PATAGONIA. DIARIO DE UN CAUTIVERIO, por Javier Garin

 

por Javier Garin

BITÁCORA DE SILVINA EN TRES MESETAS

21 de enero

Ya estamos volviendo, son las 10 am y desayunamos muy bien en la carpa junto al río Las Vueltas. El auto anda con fallas, Dani dice que patina el embrague. Ahora no tengo señal, así que escribo en el block de notas del celular. Cuando pueda voy a subirlo a internet junto con las fotos. La Patagonia es más linda de lo que había imaginado! Dani, te amo, mi bombón de chocolate con miel y almendras!

21 de enero, más tarde.

Garrón. El embrague patina cada vez más en las subidas. Hay varios tramos de cuesta. El paisaje es muy desolado y yo no sé si vamos bien. Qué pasa si nos llegamos a quedar en esta soledad? No se ve una casa, agua, nada. Este camino es de ripio y yo creo que mi amor se equivocó porque vi un cartel que indicaba otra dirección. Pero cómo se lo digo al cabeza dura? Sólo espero que no pase nada con el auto.

21 de enero, más tarde

No se puede creer. Pasó nomás. Vamos por partes.

Veníamos bajando una cuesta hacia un vallecito pelado. Pastos tiritando y nada más. El auto tomó velocidad. Cruzan el camino unos guanacos a toda carrera. Parecía que íbamos a pasar bien pero detrás de los guanacos venía… adivinen!!! Un puma!!!!

Lo juro por Dios. No tuvimos tiempo de filmarlo así que me van a tener que creer. Ese no es el problema. Lo grave es que mi amor volanteó para no matar al puma y nos fuimos con el auto a la banquina y nos frenó una piedra. Si no fuera por la piedra nos hubiéramos despeñado por una barranca de treinta metros hasta un río. Dice Dani que es un afluente del río Santa Cruz pero no sé. No les puedo explicar el susto que pasamos. Acá no hay señal y sigo escribiendo todo en el celu. No tengo otra cosa que hacer.

Estamos jodidos. El auto no anda ni cinco centímetros. Patina, algo se le rompió, echa vapor. Son las cinco de la tarde y no hay nadie por ningún lado. En la ruta principal, la asfaltada, había una estación de servicio, pero quedó muchos kilómetros atrás. Dani vio un cartel que decía: “Tres Mesetas, 18 km”. Ponele que hayamos hecho dos o tres kilómetros desde el cartel. Quedan quince. Cómo vamos a ir a Tres Mesetas? Caminando? Si es que hay algo allí, en el mapa ni figura. Está cayendo la noche, por ahora no hace frío y tenemos las bolsas de dormir y los abrigos. Nos queda poca agua, tendría que haber cargado más en la estación y como una boluda no lo hice. No importa, yo de acá no me muevo. Ni drogada salgo con un puma rondando. Era hermoso el animal y se fue tras los guanacos. Pero y si anda por acá? Si está escondido detrás de esas piedras? No salgo y no quiero que Dani salga. No quiero que el puma se coma a mi amor.

Dani dice que el puma ya se debe haber ido y que por la hora nos quedamos en el auto, pero que mañana nos vamos caminando. XDios, que alguien nos encuentre!!!

Son cerca de las ocho ahora y el cielo es espectacular. Saqué un millón de fotos, voy a matar de fotos a todo el mundo. Mi profe de historia es fanático de la Patagonia y me dijo que los atardeceres en la meseta son increíbles. Y tenía razón el hdp. Pero mejor no hablo del profe o mi amor se pone celoso y es otro garrón más.

Ocho y media y algo viene!!!!!

Sí, lo vemos de lejos. Todavía hay mucha luz pero viene con los faros encendidos. Viene de atrás, lo vemos porque el camino hace una gran curva. No sé si es camioneta o qué. Le vamos a pedir ayuda. Crucen los dedos que no sean delincuentes, violadores o algo así!!!!

22 de enero

Les cuento, tengo mucho para contar. Sigo anotando en el celu para subirlo después porque donde llegamos tampoco hay señal. Debería haber, pero dicen que hubo una tormenta y cortó las comunicaciones. Voy a guardar todas las notas y fotos en el celu hasta que haya internet y pueda publicarlas.

No pude escribir antes porque pasó de todo. Por suerte bien. Si no, el Dani se me muere, pobrecito, tan sensible!!!!

Chiques!!!! Si vienen a la Patagonia nunca se olviden el agua ni esquiven pumas porque es mortal. Mejor pisenlos. Digo en chiste, pobres animalitos.

Nos tuvieron que remolcar. Las luces que vimos era un auto. Venían tres tipos más fieros que el diablo, vestidos de paisanos. Yo pensé: “sonaste Silvina, vas a tener que sacrificarte o te lo matan al Dani”. Pero no, eran más buenos que el pan. No podían llevarnos. Avisaron a la grúa en Tres Mesetas y nos vino a buscar. Nos cobró una fortuna por quince kilómetros de m…!!!! Pero nos trajo.

Llegamos re tarde. El pueblito es recontra pequeñito. Una comisaría, una iglesia, la Municipalidad que es una casita nomas (se llama Junta de Fomento o algo así), y este camping donde estamos junto al río con tres árboles castigados por el viento que no usa nadie. Estamos solos. Los baños están limpios, viene una señora chilena a limpiar, le paga el municipio. Como no hay nadie, el Dani quiere ponerse mimoso noche y día.

Todo muy lindo pero el auto está jodido. Aprovecho que mi amor se fue a ver el auto en lo del mecánico. Adivinen, es el mismo tipo que maneja la grúa. Hay una sola grúa y un solo mecánico. Y adivinen, el mecánico es también el gomero!!!!! Seguro que no sabe nada de motores ni de gomas pero es lo único que hay. Todo el día toma mate, oye a José Larralde en la radio y mira fotos de chicas desnudas que tiene colgadas en las paredes. Habla lento, le pide permiso a una palabra para meter la palabra siguiente. Le dijo al Dani que vive solo porque la mujer lo dejó. Y claro, si es un jeropa. Adivinen de nuevo!! La mujer vive a cincuenta metros de distancia, en la casa de su nueva pareja. Parece que le metía los cuernos con el vecino y ahora todos viven en la misma cuadra. El pajerto tiene que ver a la mujer con el otro tipo en la misma cuadra todos los días de su vida. (Esto no sé si lo voy a publicar, a ver si me demandan).

Lo del vapor que salía del radiador parece que el pajerto lo arregló rápido, era una pavada, un caño o algo así. Pero hay que cambiar la pastilla del embrague. Puede ser que esté cristalizada??? Qué significa que la pastilla del embrague está cristalizada? Yo las únicas pastillas que conozco son las que venden en el kiosco. Lpm. Para mí que nos está currando. Al menos estamos en el pueblo y no en medio de la nada. Bah, es un decir, porque ESTAMOS en medio de la nada. El pueblo es la nada misma, chiques. Si quieren morirse de embole vengan a Tres Mesetas.

Parece que el repuesto hay que traerlo de otro lado. El mecánico dice que mañana o pasado se lo va a encargar a alguien que viaje a Comandante Luis Piedrabuena. Se dan cuenta? Mañana o pasado. Como si fuera lo mismo un día que dos. Esta gente no tiene noción del tiempo. Y tampoco hay micros. Hay solamente una combi de la municipalidad que va a Piedrabuena de vez en cuando, si tiene ganas. Estamos atrapadeeeeeeeeeees!!!!

Fuera de joda. Sin micros, sin señal de celular, Internet cortada por un rayo y lo único que hay son unos teléfonos pedorros que nos van a prestar a la tarde a ver si puedo llamar a mi mami, pobrecita.

Y el Dani a cada rato me quiere arrinconar en la carpa, está aburrido el pobre.

23 de enero

Conocí a la intendenta. Tiene una historia re grossa, re pesada, pero después les cuento. Tengo que contarles lo del OVNI. No, mejor lo del OVNI que espere. Les cuento ahora de la intendenta. Me lo dijo la chilena, la que limpia, hoy en el baño. Ya conozco vida y obra de la mitad del pueblo. Infierno grande!!!!!!

Vieron, chiques, que anoche tenía que hablar por teléfono? Y dónde iba a ser si no era en la Municipalidad o Junta Vecinal? Pero resulta que el marido de la chilena, es decir el chileno, es albañil y estaba haciendo unos trabajos contratado por la intendenta y el teléfono no se podía usar, así que me hicieron ir a la casa de la Intendenta. Es preciosa. La casa, digo. La intendenta es jovata pero también tiene lo suyo, a juzgar por cómo la miraba el Dani. Que no se atreva!

La casa es como un chalet alpino, no muy grande, pero tiene una planta alta con una escalera bastante empinada. La intendenta es muy amable, como toda la gente acá. Les cuento que somos la sensación del pueblo!!!! Todos saben que estamos varados acá, todos nos saludan, ya todos conocen nuestra historia, porque la chilena es la agencia de noticias del lugar. Bueno, el caso es que la intendenta nos dijo que es viuda y vive sola. Anoten: viuda, escaleras…

(Todo lo que ahora sigue sobre la intendenta no es para publicar pero igual lo anoto. Me dijo la chilena en el baño -le encanta hablar en el baño del camping, aclaro que se llama Rosa pero me gusta más decirle la chilena-… Me dijo que la intendenta nunca tuvo hijos, parece que no puede concebir, el marido tenía mucha plata y era dueño de una estancia cerca, y lo peor es que no es viuda por un hecho de Dios o del Destino. Es viuda porque lo liquidó al marido. Sí, xD!!!!!

Hago un llamado a la sororidad. Parece que el marido era un reverendo pedazo de mierda y todos lo odiaban. Y además era borracho y la cagaba a palos. Durante años la cagó a palos. Según la versión oficial, el marido se cayó borracho por la escalera. Según la versión de la agencia noticiosa “Chilena del Baño Press”, fue la propia intendenta, Rosario, la que lo empujó dándole su merecido. Según la chilena, todo el pueblo lo sabe, aunque fingen creer que se cayó solo. Y que por eso mismo la eligieron para intendenta, o presidenta de la junta o como se llame).

Todo muy lindo, pero el teléfono no anduvo. La línea telefónica también estaba interrumpida por el rayo que pegó en medio de la meseta y dicen que van a tardar como un mes en repararlo. La intendenta me dijo que mande un telegrama a mi mami, y lo voy a hacer cuando abra el correo. Abre a las diez. Quién usa telegrama hoy día????? Sólo en Tres Mesetas. Incluso se ofreció a recibir la respuesta de mi madre en su domicilio, si es que mi vieja llega a sobrevivir al ataque de pánico de ver a su hijita perdida en la Patagonia.

Me embalé con esto y me olvidé de contarles lo más grosso de todo. El OVNI!!!!!

Sí, xDios. Salimos de la intendenta con Dani y nos fuimos a caminar mientras anochecía. Tomamos un camino que sube a la meseta del costado. Entiendan que el pueblito está en un valle entre mesetas, protegido del viento. Hay dos ríos que confluyen en otro que se va valle abajo al mar o al río Santa Cruz. Se llama Tres Mesetas porque hay una meseta al Sur, al costado del río principal, otra Meseta al Norte del otro lado del río y una tercera Meseta al Oeste, donde se unen los dos afluentes. Es como si fuera un cruce de tres calles, me entienden??? Ya lo van a ver en las fotos. Hay un caminito que sube a la Meseta del Sur y subimos. Cuando llegamos a lo alto empezó a soplar un viento que me congelaba los ovarios. Mamita!

Admirábamos ese cielo con millones de estrellas cuando de repente, detrás de otra meseta más lejana, vimos un resplandor. El resplandor aumentó hasta que apareció por el filo de la meseta el OVNI. Lo tengo fotografiado y filmado y ya lo voy a subir. Era una luz muy fuerte, o mejor dicho varias luces de colores. Después se levantó de golpe en el cielo, hizo como una curva y tomó envión y zas!!! Salió disparado hacia el medio de la noche y desapareció. No es verso esto.

Nos quedamos estupefactos. Después nos parecía que lo habíamos soñado. Cuando llegamos a la carpa no nos podíamos dormir. Y yo le dije al Dani: y qué pasa si este pueblo no es un pueblo de verdad sino una estación extraterrestre? Qué pasa si los ET buscaron este lugar en medio de la nada para hacer sus aterrizajes y esta gente que vemos no es gente de verdad sino una ilusión óptica, un hipnotismo, y en realidad son lagartos, como en esa serie ridícula que miraba mi viejo? Mirá si la intendenta, que tanto te gustó, resulta ser una lagarta y te morfa? A lo mejor se alimenta de tipos y se morfó al marido. O algo peor. El boludo del Dani se reía de mis ideas pero se quedó preocupado por el OVNI. Hoy a la mañana le pregunté a la chilena y me dijo que no había visto nada, ni luces ni OVNIS ni nada.

En un rato voy al correo. Después sigo.

23 de enero a la noche

Rapidito. Mandé el telegrama. Por ahora todo tranqui. Seguimos shokeados por el OVNI. Pedimos ir mañana en la combi con los que viajan a Piedrabuena. Ya va, Daniiiiiiiii.

24 de enero

Queríamos ir en la combi del municipio a Comandante Luis Piedrabuena para comprar nosotros los repuestos y de paso conocer pero los muy ortibas no nos esperaron. Salieron como a las seis de la mañana. Y nos dejaron en banda. No sé qué vamos a hacer el resto del día. Lo único bueno es que Rosario (la intendenta) nos mandó un guiso exquisito con la chilena. Qué tal? Quién recibe el almuerzo preparado por una intendenta, eh, eh?

24 de enero a la noche

Aquí estamos de nuevo. Pasó algo raro. Pasan demasiadas cosas para un lugar en el que no pasa nada.

Aparte de que a mi Dani le cayó medio mal el guiso y anda con retorcijones, yo tuve un desmayo y me llevaron a la salita. Me bajó la presión, no es nada pero escuché una conversación extraña entre la enfermera y la intendenta, que se acercó a preguntar por mí. Creían que estaba dormida y escuché que hablaban de mí y decían cosas un poco raras. La enfermera le dijo que yo seguro era fértil. Qué significa eso? Y qué les importa si soy fértil o no? Me querrán preñar como a un cordero?

Encima después nos pusimos a charlar con la Intendenta y me dijo, como si fuera a propósito, que tenían un par de casas desocupadas que habían sido construidas por el Instituto de la Vivienda para atraer nuevos pobladores. Me dijo que el pueblo siempre tenía gente de paso porque era un “lugar de transición”. De transición adónde? Si no hay nada en los alrededores, no pasa ni un auto. Dijo que si queríamos podíamos instalarnos en una de las casas hasta que llegue el repuesto.

Y yo le empecé a decir a Dani en la carpa, por joder y entretenerlo nomas, porque está medio descompuesto: Mirá si no nos dejan salir más de acá. Mirá si nunca despacharon el telegrama a mi vieja y nadie sabe que estamos en este pueblo. Mirá si nos quieren para poblar el pueblo y procrear y tengo que atender a todos los paisanos para que me preñen.

Porque acá las mujeres son todas mayores. Chicas para embarazar no hay. Y sólo vi dos nenes en todo el pueblo. O no hay chicos o los tienen encerrados. Los chilenos no tienen hijos, la intendenta no tiene hijos, el mecánico corneta no tiene hijos, la ex con el nuevo marido no tienen hijos, la panadera que me vende los churros es viuda (y vuelta a casar) y no tiene hijos, nadie tiene chicos, salvo esos dos que vi de lejos en la calle. Dicen que hay una escuela, pero no sé dónde está, y el lugar es chico.

Yo le decía así en joda y en eso llega la grúa al camping y baja el mecánico y nos dice que lo lamenta pero que la gente que fue en la combi a Piedrabuena no pudo traer el repuesto, pero lo dejó encargado para la semana que viene. La semana que viene!!!!!

No lo comenté con Dani, pero pensé, ya más seriamente: Y si nos están verseando y no fue nadie a buscar el repuesto? Por qué no nos esperaron en la combi en vez de irse sin nosotros? Si realmente nos tienen secuestrados acá, o nos quieren para trasplante de órganos o para que le tenga un hijo a la intendenta con esperma del marido guardado en un tubo en el freezer porque ella no puede procrear? Bueno, estaba jodiendo conmigo misma, pero… Igual me da un poco de miedito.

27 de enero

Vuelvo a escribir después de unos días horribles. Una pesadilla en serio.

Vieron que el Dani se sentía medio mal? Bueno, todo empeoró esa misma noche. Empezó a vomitar y le subió la fiebre. Deliraba. Al fin salí en la oscuridad a buscar a la chilena, que vive cerca. Un frío espantoso. Media hora llamando hasta que se despertó. El marido vino con la camioneta y lo cargó al Dani y lo llevaron hasta la salita. El médico no estaba, se fue a atender un parto en una estancia y llamaron a la enfermera. Ella le quería dar una inyección al Dani pero yo dije que no le den nada hasta que venga un médico. Y él deliraba y deliraba. Al final tenía como cuarenta grados de fiebre y la enfermera me convenció de aplicar una inyección antifebril o algo así.

(Nota: cuando pudimos hablar tranquilas, la enfermera me contó que tiene hijos grandes en otro pueblo).

Fue una noche de mierda. Recién como a las ocho de la mañana pasó el médico por la salita. Obvio que la salita estaba vacía, sólo estaba el Dani en una camilla y yo tirada en otra camilla velando. Pobrecito!!!!! Empezaron a revisarlo y darle cosas. Todo el día delirando y vomitando. Le dieron inyecciones también para cortarle los vómitos. El médico es otro geronte, me preguntó qué había comido y le dije que el guiso de la intendenta.

(Nota: el médico es una momia y si tiene hijos deben ser de cuarenta años mínimo).

Bueno, el caso es que también la intendenta pasó por la salita a preguntar y a decirme que había llegado la contestación del telegrama y que mi mamá decía que estaba todo bien y que no nos preocupemos, que ella estaba tranquila. También mami les avisó a los padres de Dani y al trabajo porque para fin de mes tenemos que estar de nuevo cada uno en su oficina, por si nos demoramos. Estamos a dos mil setecientos kilómetros de Buenos Aires, no es poco viaje, eso si nos arreglan el auto alguna vez.

No sé qué más pasó porque después yo también estuve medio mal, no como el Dani, pero con mareos y vómitos y no me acuerdo bien. Si estuve desmayada, habrán aprovechado para preñarme todos los varones del pueblo o para inyectarme el esperma del intendente muerto, o del médico geronte, ya que el Dani no me podía defender.

Esa noche fue peor aún porque Dani casi se muere. Le dio un pico de fiebre y convulsionó. Tuve que salir corriendo en mitad de la noche a buscar al médico y cuando vino puso una cara preocupada que casi me muero del susto. Ni sé qué le dieron para frenar las convulsiones y la fiebre, y el doctor dijo que si a la mañana no mejoraba había que trasladarlo en ambulancia a alguna ciudad con hospital, que tenían una radio de emergencia para eso.

El día siguiente fue domingo y la cosa estuvo mejor porque Dani amaneció bien y hablaba y se lo veía algo animado. Yo sin dormir. La chilena pasó a preguntar y me dijo si quería ir a misa para rezar y yo le dije que no, que no me movía de ahí, pero llegó la enfermera y entre las dos y el propio Dani me convencieron.

Esa misa fue muy extraña. Todos me estaban mirando y hablaban entre ellos. Una vieja dijo a otra: “Pobrecita, tan linda y tan joven”. ¿Pobrecita qué? El cura se puso a dar un sermon también muy extraño. Era un hombre muy viejo y esquelético y hablaba como un loco, yo creo que el cura tiene demencia senil, se la pasó hablando de cuando fueron las mujeres al sepulcro de Jesucristo y lo encontraron vacío y este se apareció a María Magdalena y no quiso que lo tocara porque todavía no había subido al cielo y después se les apareció a unos seguidores en el camino de una aldea, no me acuerdo cómo se llamaba, y discutió con ellos y no lo reconocieron porque no se daban cuenta de que era él, y después fue y se metió entre los discípulos y se puso a comer y beber y dijo que no era un fantasma ya que los fantasmas no comen ni beben y no sé cuántas cosas más, y todo se emocionaban con eso del muerto vivo. Luego pidió por la sanación de Dani, que fue la única parte de la misa que me gustó. Al terminar la misa, en la que habría unas cuarenta personas, es decir, casi todo el pueblo, incluyendo el mecánico cornudo, su mujer y su amante, la intendenta, los chilenos, los peones de la camioneta, la empleada del correo, la panadera que me vende churros y todos los que conocí, la gente se juntó en la puerta y me saludaban y preguntaban por Dani, y mientras yo respondía algunos murmuraban a mis espaldas cosas extrañas. La panadera dijo a otra mujer, refiriéndose a mí y a Dani: “Lo que pasa es que todavía no se enteraron de lo que pasó”. Yo lo escuché al pasar y después me quedé pensando qué quería decir aquello. La otra mujer le respondió casi en un murmullo: “Es la transición. O vos te olvidaste lo que te costó?”.

Bueno, no sé qué quería decir todo aquello pero hablaban de mí, no lo imaginé. Esa tarde Dani se la pasó durmiendo y yo también aproveché para descansar. Pero la noche fue de nuevo horrible porque la fiebre subía y bajaba. Hoy recién Dani despertó bien y creo que lo van a dar de alta.

Lo único bueno es que dormimos estas noches en camas y no en la carpa. O mejor dicho, camillas. La salita es linda y tranquila. Por la mañana apareció la intendenta y me dijo que, como se iba a demorar el repuesto del auto, nos habían preparado una de las casas vacantes que son propiedad de la comuna. Yo no quería pero después de todo lo que nos pasó no me pude resistir y fui a ver. Son dos casitas alpinas hermosas y muy bien puestas y amuebladas. Nos dieron una de ellas para que nos instalemos, y la chilena y el marido se encargaron de desarmar nuestra carpa y traernos todas las cosas a la casita. Son gente muy buena y amable. Si no fuera por todo lo que padecimos estaríamos felices. Cuando agarre la cama esta noche voy a dormir sin parar. Dani va a venir conmigo porque el médico dijo que ya le dará el alta. Mañana sigo.

28 de enero

Qué lindo es dormir en una cama cómoda! Si la intendenta nos envenenó con el guiso para poder trasladarnos a la casita y que nos quedemos a vivir para toda la eternidad en Tres Mesetas, la cosa le está saliendo bien porque la alpina nos encantó a ambos. Dani está mucho mas restablecido, tenemos cocina para hacernos unos mates y desayuno como la gente y para preparar el almuerzo, el baño es comodísimo y hay agua caliente y calefacción para el frío de la noche. Hay lavarropas y ya lavé todo lo que teníamos sucio. Desde nuestro dormitorio en el primer piso se puede salir al balcón y mirar el río y la meseta en la otra banda, un paisaje hermoso, áspero pero hermoso.

Me enteré que mañana hay otra combi a Piedrabuena, así que reservamos dos lugares para ver si podemos apurar los repuestos.

29 de enero

De nuevo los extraños sucesos. Un día que la pasamos bien, y chau, tiene que venir el castigo. Para que no se olvide de nosotros el chofer de la combi (que es el marido de la panadera que me hace los churros), nos fuimos bien tempranito a la Junta Vecinal a esperarlos. Varias personas también viajaban. Otra vez sorprendí a una de esas mujeres chusmeando sobre nosotros y diciendo en voz baja: “parece que es ella la que más se resiste”. Casi le pregunto qué quería decir, pero, cómo sé si estaba hablando de mí o de otra? Llegó la combi y nos acomodamos lo mejor que pudimos. Anduvo unos cuarenta minutos sin problemas y de repente se empezó a quedar, hasta que se paró. No sé qué desperfecto tuvo. El asunto es que no llegamos a Piedrabuena y nos tuvo que ir a rescatar el mecánico con su grúa.

Desde que llegamos a Tres Mesetas no pudimos salir más. Díganme ustedes si no estarían asustades!!!! Por hache o por be, seguimos encerrados en este pueblo. Sin internet y sin teléfono. La radio sólo se puede usar por emergencia médica, dicen. La población más cercana, Piedrabuena, está a como cuatrocientos kilómetros por caminos de ripio. La estación de servicio que pasamos al venir, la que está en la ruta de El Chalten, debe distar una hora mínimo, tal vez más. No hay cómo salir de acá ni comunicarse. Nuestro único contacto es el correo, el telegrama, si es que realmente lo despachan y si es que mi madre realmente me contestó y no inventaron todo. Yo estoy cada vez más preocupada. Es demasiado. Ya no llegamos a tiempo para retomar el trabajo y nos van a descontar unos cuantos días de sueldo.

Con Dani decidimos pedir una grúa del seguro y que nos vengan a buscar y nos lleven con auto y todo a otro pueblo. Según la guía del seguro, hay una grúa asignada para esta zona en Puerto San Julián. Pero cómo la solicitamos? Telegrafié a mi vieja para pedirle que se comunique ella con el seguro y nos gestione el rescate.

Para colmo, hubo algo que me asustó mucho. Se juntaron varios vecinos en la iglesia, y no había misa. Los vimos de lejos. Una reunión muy extraña y secreta a las nueve de la noche. Yo le dije a Dani de ir a chusmear. En cuanto nos acercábamos a la iglesita, nos salió al cruce la chilena, como si fuera ex profeso, y nos empezó a dar charla. Pero la corté y le dije que quería ver qué pasaba en la iglesia y la chilena dijo que era una reunión vecinal por el tema de los desperfectos telefónicos. Me di cuenta de que estaba mintiendo. Se reunieron por otra cosa, algo que no querían que supiéramos. No es paranoia, pero yo sé que nos vigilan noche y día y están tramando algo.

A la noche hay momentos en que no puedo ni dormir. Y se siguen viendo luces en el cielo. No tan claro como la otra vez, pero hay luces detrás de las mesetas, desde la ventana del dormitorio las vi.

Hasta me da no sé qué comer. La comida la hacemos nosotros, sí, pero con mercadería que nos venden ellos. Nos pueden envenenar cuando quieren, total no podemos aprovisionarnos en otro lado, estamos obligados a comer cualquier cosa que nos metan o ayunar. Y si no es por la vía de la comida, nos pueden envenenar o drogar por el agua que tomamos. No estoy paranoica, es que desespera estar encerrados así. Estamos totalmente a merced de gente que no conocemos, si es que son personas. A Dani se le ocurrió una teoría alternativa a los lagartos: que esta gente está toda muerta y son espíritus. Dice que me fije bien y me voy a dar cuenta de que no es gente normal, que este es un pueblo fantasma y sus habitantes murieron hace años, como en “Pedro Páramo”. Qué tranquilizador!!

30 de enero

Ya está terminando el mes y no podemos salir de acá. Envié otro telegrama sin decir la verdad de lo que pasa para no asustar a nuestras familias.

El colmo. El mecánico (que también se comunica con los repuesteros de Piedrabuena por telegrama, ahora que no anda ni siquiera la combi) nos dijo que el repuesto se va a demorar tres días más.

Le dijimos que nos teníamos que volver sí o sí y que le dejábamos el auto para reparar y una vez que estuviera arreglado veríamos cómo enviarlo a Buenos Aires, o de última venderlo por acá.

Lo de la grúa del seguro no sabemos si va a funcionar porque ahora, de repente, nos dicen que tampoco están saliendo los telegramas y no saben si el anterior mi madre lo recibió o no. Entonces para qué me tomaron el telegrama de hoy? O es todo un engañapichanga?

Tendríamos que haber pedido una grúa del seguro desde el primer momento, pero nos hicieron el verso con que se podía arreglar, y así nos entretuvieron, y ahora no podemos conseguir una grúa, y encima Dani le ofreció al mecánico que nos lleve a Piedrabuena con su grúa, y qué pasó? Cuando fue a enganchar el auto para remolcarnos se le rompió la grúa!!!!!

Así que es todo mentira y nos quieren retener a toda costa, todo esto es a propósito. Dani discutió con el tipo y le dijo que se quede con el auto y lo arregle cuando pueda, que nosotros nos íbamos igual, pero resulta que no hay micro ni combi ni nada, y no podemos salir.

Entonces me fui a lo de la intendenta. Ella tiene una cuatro por cuatro y nos podría llevar por lo menos hasta la estación de servicio. Pero adivinen. Me dijo que no anda, que está descompuesta. ¿De repente todos los vehículos están rotos? Nos toman por boludos. Como no le creímos fue y nos mostró que no arrancaba. Y al chileno no lo encontramos en su casa, según Rosa la chilena había tenido que ir a llevar al médico a ver al recién nacido en una estancia, porque, claro, el auto del médico también estaba roto.

Dani quería esperar, pero yo le dije que si no me acompañaba me iba sola. Decidimos hacer dedo, aunque por el camino no pasa nadie, nadie. Armamos las mochilas y nos fuimos a caminar y esperar. Dani no estaba de acuerdo pero no dijo nada y me hizo la gamba. Estuvimos cuatro horas esperando y no pasó ni un solo auto, ni una moto, y tuvimos que volver, y la gente nos miraba regresar a la alpina derrotados y era como que se compadecían de mí.

Cuando todos se fueron a cenar, volvimos a la casa de los chilenos para hablar con el hombre. Ya había vuelto y la camioneta estaba en la puerta. La chilena nos saludó con lástima. Odio cuando hacen eso. El marido dijo que a la mañana nos iba a acercar hasta la estación de servicio y que no le paguemos nada. Igual quisieron convencernos de no ir, de esperar. Yo estoy segura de que en cuanto nos alejamos la chilena le avisó a la intendenta. Ya deben estar inventando alguna otra cosa para que no podamos salir del pueblo.

El tema es llegar a la estación de servicio como sea. Ahí se mueve más tránsito y algun auto o camión que nos lleve habrá.

31 de enero

Son las diez de la mañana y el hijo de puta del chileno no vino.

Ahora me dice Dani que me calme, que ya está viniendo con la camioneta, que lo vio por la ventana. Si no podemos salir de acá esta vez, quiere decir que realmente estamos secuestrados.

Llegó la camioneta del chileno. Cruzo los dedos.

31 de enero, poco después

Escribo esto muy rápido. No queda tiempo. No pudimos llegar a la estación de servicio. Apenas hicimos quince kilómetros y el chileno se paró y no quiso seguir.

Ojalá alguien alguna vez encuentre este celular y lea estas notas, porque esta gente no nos va a dejar ir jamás. Ahora mismo me están buscando y escribo escondida entre las rocas en un desfiladero que sube a la meseta. Me metí acá porque Dani se puso a pelear con ellos y me dio tiempo de escapar.

Desde que salimos vinieron autos siguiéndonos de lejos. Yo me di cuenta al mirar para atrás. Venían como escondiéndose varios autos que ayer no se veían por ningún lado. Ahora parece que hasta la camioneta de la intendenta andaba. Hija de puta!!!!

De repente el chileno se detuvo y nos dijo: “Tienen que verlo de una vez, me pidió la intendenta que se los muestre. Bajen.”

No queríamos bajar pero no tuvimos más remedio. En eso llegaron los autos y vino la intendenta y nos dijo: “Miren allá abajo”.

Yo no miré. Sólo Dani. Siempre termina haciendo lo que le dicen. De repente se enfureció y empezó a gritar: “Qué hace nuestro auto en el barranco? Lo destruyeron. Por qué lo tiraron?”. La intendenta le dijo: “Ustedes lo tiraron, se desbarrancaron por el puma. Todavía nadie encontró el auto ni los cuerpos porque acá transita muy poca gente y no es visible desde la calzada.”

Dani se puso a gritar fuera de sí y yo me escapé corriendo y me metí entre estas rocas, pero me están buscando y me van a encontrar. Y Dani grita y grita y llora y dice que el auto no cayó al barranco, que chocó contra una roca, que estamos vivos, pero cada vez sus gritos son más débiles y resignados.