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CUENTO DE REYES: LA MULTIUSO AZUL, por Javier Garin

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  por Javier Garin                                                                               1 No sé si la felicidad existe. Pero, si existe, no puede ser mejor que un pibe en bicicleta. ¿Cuál es la diferencia entre arrastrarse y volar? Una bicicleta. ¿Cuál es la diferencia entre ver pasar la vida fugitiva y vivirla? Una bicicleta. Ningún pequeño explorador del suburbio ha recorrido a pie las ignotas comarcas situadas más allá de su barrio. A pie, no hay esperanza de llegar a un incendio antes de que lo apaguen los bomberos. Pero un par de pedales girando en el vacío, un par de ruedas que zumban sobre el asfalto caliente... ¡Eso sí! ¡Eso transforma a cualquier pibe en dueño del tiempo y el espacio! Al acercarse el verano de sus once años, Edu tenía muchas posesiones valiosas. Una colección de insectos, una biblioteca de ocho novelas infantiles, quinientas bolitas conquistadas en infinidad de desafíos, una camiseta de Boca Juniors... Pero ninguna le er

EL JUEZ Y EL CONDENADO, por Javier Garin ("Historias del Fin del Mundo")

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    Por Javier Garin. -Emanuel Kant –dijo el Juez  por toda explicación. Distante detrás de su escritorio, el Juez tamborileaba con impaciencia sus dedos mortecinos,   grises, como polillas crecidas en la penumbra de los archivos y en las grutas polvorientas de los expedientes arrumbados. Así lo recordaba el convicto desde aquella última audiencia posterior a su condena: la cara blanca e   inexpresiva de foja numerada, a la que sólo faltaba el membrete de “uso oficial” para completar una indubitable filiación forense; el bigote tembloroso como antenas de un insecto ciego, de hábitos nocturnos; y aquellos lentes delgados de láminas de hielo, que nunca enfocaban la vida, que sólo leían la vida a través de los informes en jerga de los escribientes judiciales. -¿Emanuel Kant? –preguntó el condenado, sintiendo desvanecerse su última esperanza.             -Kant, sí –repuso el Juez con malsana satisfacción-. El imperativo categórico. Vamos, profesor. Usted lo conoce bien, es un h